Una bebida característica de la cultura mexicana, es sin duda, el tequila, sí bien también existe el mezcal, aguardiente, tepache y pulque, a nivel internacional el atractivo que tiene la bebida de agave azul es impresionante, por eso y más merece todo mi respeto. Debo confesar que pasé más de diez años de mi vida evitando el tequila por culpa de mi primera borrachera (de eso no me gusta ni acordarme), pero una vez que conoces el cariño que le tienen los extranjeros a esta peculiar bebida y al delicioso sabor de las margaritas, comience a agarrarle cariño.
Durante mi estadía en el Perú aprendí a valorar más mi país y sus encantos, una vez que dejas tu tierra te conviertes en un embajador que se encarga de realzar todo lo bonito que tiene México; pasas por la etapa de defender a toda costa tu acento, tus costumbres y la comida de tu país. Sin embargo, enfrentarme al pisco, definitivamente, no fue una tarea fácil. El pisco deriva del destilamiento de la uva y tiene un sabor bastante fuerte, sucumbí ante sus encantos en varias ocasiones, más de las que me gustaría reconocer, pero yo les pregunto a aquéllos que lo han probado: ¿Cómo no hacerlo? Sí te ofrecen una variedad de coctelería preparada con este delicioso elixir. La contienda entre Chile y Perú sobre el origen del pisco, desde mi punto de vista no tiene razón de ser el pisco es peruano y punto, lo siento amigos chilenos.
Llegado este momento pueden decir que mi lado peruano se realza en cada línea, pero en verdad no hay mucho que yo pueda hacer, cuando pruebas tu primer pisco sour la vida te cambia, tiene una consistencia maravillosa no es líquido completamente, ya que esta bebida es espesada con clara de huevo, ustedes pensarán: ¡Qué horror! Sí yo también lo pensé, pero jamás notarás un mal sabor, todo lo contrario tu paladar se deleita con cada trago y combinado con una causa rellena de mariscos, un chicharrón de pescado con leche de tigre o un rocoto relleno, puedes decir que conoces el cielo, gracias por eso mi querido Perú.
El pisco sour original es de limón, uno de los mejores que probé se sirve en el Hotel Bolívar, ubicado en la Plaza San Martín. Pero esta preparación también puede ser mezclada con diferentes frutas lo que la hace aun más increíble, tuve el placer de probar chica sour, maracuyá sour y camu camu sour, todos ellos son una verdadera delicia. Por esta y muchas más razones disfruté tanto mi estadía en el Perú, encuentras excelente comida y bebidas a un muy buen precio, no necesitas ir a un restaurante de lujo para comer rico. Aún así después de seis meses comencé a soñar con comida mexicana y supe que a pesar de las delicias que me ofrecía mi querido Perú, uno siempre tiene que recargar energías con una tortita al pastor o unos taquitos de suadero.
Algo muy curioso es que no muy lejos de Lima, a unas tres horas en carro, hay un lugar llamado Pisco, es una pequeña ciudad que queda camino a la Reserva de Paracas, en mi mente estaba el hecho de que sería un lugar como Tequila, Jalisco, por eso hice todo lo posible por llegar ahí, tuve que tomar un taxi ya que no había transporte público a ese lugar, pero me llevé una gran sorpresa cuando llegué y pregunté por lugares en dónde podía comprar pisco, no sé, alguna fábrica, algún museo, pero las personas me miraban indiferentes y dijeron que no existía algo así, que ahí no vendían pisco... ¡No venden pisco, en Pisco! Vaya sorpresa, debemos comenzar una campaña para hacer de Pisco un lugar para el pisco ¿quién a favor?
Algo muy curioso es que no muy lejos de Lima, a unas tres horas en carro, hay un lugar llamado Pisco, es una pequeña ciudad que queda camino a la Reserva de Paracas, en mi mente estaba el hecho de que sería un lugar como Tequila, Jalisco, por eso hice todo lo posible por llegar ahí, tuve que tomar un taxi ya que no había transporte público a ese lugar, pero me llevé una gran sorpresa cuando llegué y pregunté por lugares en dónde podía comprar pisco, no sé, alguna fábrica, algún museo, pero las personas me miraban indiferentes y dijeron que no existía algo así, que ahí no vendían pisco... ¡No venden pisco, en Pisco! Vaya sorpresa, debemos comenzar una campaña para hacer de Pisco un lugar para el pisco ¿quién a favor?
Así que definitivamente en esta batalla no puede haber un ganador, el único perdedor es mi cartera porque NECESITO regresar al Perú con frecuencia, sino mi vida ya no tendría sentido.