Como les comentaba en la entrada anterior, tanto Denise como
Erwin hablan español porque en la escuela se los enseñan, pero ellos entienden
el mixteco porque en casa todos lo hablan. Audelia me platicó que la mayoría de
los niños en las comunidades de Oaxaca están en la misma situación, les pueden
hablar en mixteco, zapoteco, triqui o cualquier otro idioma (yo prefiero decir
idioma que lengua) y aunque no sepan hablarlo lo entienden bien y contestan en
español; el problema que se deriva de esta situación es que nadie, ni siquiera
su familia, les ha dado clases de mixteco o enseñado a hablar.
Audelia me dijo que a Denise no
le gusta hablar en mixteco, sabe algunas palabras pero prefiere hablar español
y Erwin está más interesado en hablar mixteco que español, incluso los días que
estuve ahí él no quiso ir a la escuela, tal vez la razón es que su escuela
queda a 40 minutos caminando de su casa, aun así Denise se levanta diario, se
coloca su uniforme y emprende el largo viaje a la escuela.
Como se puede observar la
política educativa en México está orientada a la asimilación de las comunidades indígenas algo que afecta considerablemente
el entramado social y cultural de éstas; los únicos mecanismos que
contrarrestan esta situación es la misma comunidad, pues las personas
interesadas en hablar su lengua materna lo hacen. Audelia me comentó que ella y
sus amigos hablan e incluso se escriben en mixteco (ya sea en Facebook o en
mensajes de texto), pues para ellos es una forma de mantener vivo su idioma
además de conservar en secreto sus conversaciones en la vía pública, algo que
les parece muy divertido.
¡Me encantó tu entrada!
ResponderEliminar¡Buen inicio de semana!
¡Qué bonita entrada Gaby! Y vamos por San Luis Potosí :)
ResponderEliminar